Formación Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria

CURSO DE ACTUALIZACIÓN EN PRODUCTOS SANITARIOS PARA LA ELABORACIÓN Y ADMINISTRACIÓN DE MEDICAMENTOS

Optimización del tratamiento de la sepsis en un paciente crítico. Criterios de sepsis/shock séptico. Recomendaciones de Sociedades Científicas. Evidencias de su aplicación

2. Epidemiología de la sepsis

En España se han realizado diversos estudios epidemiológicos. En el estudio de Esteban y colaboradores6, prospectivo, con revisión de pacientes mayores de 18 años, ingresados en UCIs y en salas de hospitalización, en tres hospitales del área de Madrid, durante cuatro meses del año 2003, se identificaron 702 pacientes con sepsis, lo que correspondía al 4,4 % de los ingresos hospitalarios, falleciendo el 12,8%, en el hospital. La mortalidad por sepsis grave fue de 20,7%, y por shock séptico de 45,7%. Extrapolando los datos obtenidos a la población atendida por estos hospitales, daba una incidencia de 367 casos de sepsis, 104 pacientes con sepsis grave, y 31 pacientes con shock séptico por 100000 habitantes y año. La mayoría se inició con infecciones comunitarias, y el origen más frecuente de la infección fue el pulmón. El 28% de los pacientes con sepsis, desarrollaron sepsis grave, el 76%, el mismo día que cumplían criterios de sepsis, evolucionando el resto con una media de tiempo de dos días. El 8% de los pacientes sépticos, desarrollaron shock séptico, y el 49% lo hizo el mismo día que presentaba criterios de sepsis grave. Solo el 32% de los casos de sepsis grave, ingresaron en UCI.

Otro estudio, realizado a nivel de UCIs (14 Unidades/ 164 camas de CI), por Blanco y cols.7, en Castilla-León y Asturias, prospectivo, durante dos períodos de tres meses en el año 2002, observó que el 11,9% de los pacientes presentaban al menos , un episodio de sepsis grave, estimando una incidencia acumulada de 25 casos de pacientes atendidos en CI por 100000 habitantes/año, y en el 78,1% de los casos existían dos o más fracasos orgánicos. La causa más frecuente fue la neumonía. La mortalidad fue de 48,2% en CI, y 54,3%, en el hospital. La media de estancia hospitalaria fue de 24 días, y de CI, de 10 días, siendo más elevada en los supervivientes que en los no supervivientes.

Recientemente, Carmen Bouza y colaboradores8, han revisado todos los diagnósticos de alta a escala nacional utilizando la CIE 9ª-MC durante un periodo de 6 años. La incidencia de sepsis grave fue de 87 casos por 100,000 habitantes, con un predominio de hombres (58%), pacientes mayores de 65 años y con comorbilidades asociadas. El 16% de los pacientes presentaron bacteriemia. La mortalidad hospitalaria fue del 43%, influenciada por la edad, el género masculino, la presencia de comorbilidades y el número de disfunciones orgánicas. La evolución temporal mostró un incremento de la edad, las comorbilidades, la gravedad y la incidencia de la sepsis. Afortunadamente, la gravedad disminuyó durante el periodo del estudio.

Estos datos españoles coinciden con la mayoría de estudios internacionales que observan una incidencia creciente de sepsis grave, en pacientes más añosos y con mayor número de comorbilidades acompañantes, pero con una tendencia clara de reducción de mortalidad. Se han realizado diversos programas de transferencia del conocimiento, que podrían explicar esta reducción de mortalidad, dirigidos a la implementación de las guías de práctica clínica a nivel nacional9 e internacional10 que han demostrado que es posible mejorar los indicadores de proceso (mejor tratamiento) y de resultado (menor mortalidad) en el tratamiento de la sepsis11, de forma coste-efectiva12. Recientemente, estos mismos programas se han aplicado con éxito al paciente pediátrico13.