EVALUACIÓN DE RESULTADOS
FALLO TERAPÉUTICO
En general se considera que el tratamiento ha fallado y debería ser cambiado cuando:
- El descenso de la carga viral es menor a la esperada o no es indetectable tras 48 semanas.
- Hay repunte de las cargas virales.
- No se mejora el estado inmunológico.
- Hay progresión del deterioro clínico
Los motivos puede deberse a falta de adherencia, desarrollo de resistencias, intolerancia al tratamiento, interacciones desfavorables o variabilidad farmacológica.
Identificar la causa del fallo es imprescindible para adoptar una actitud terapéutica correcta.
Los test de resistencia son una herramienta para guiar el tratamiento. Los más habituales son los de genotipos virtuales. Estos test permiten el diseño de tratamientos que idealmente deberían contener tres fármacos activos de dos familias diferentes.
Los nuevos antirretrovirales como darunavir, etravirina, raltegravir o maraviroc, tienen mayor barrera genética y pueden ser útiles en pacientes multitratados.
Las estrategias de interrupción estructurada del tratamiento han sido ineficaces y no se consideran aconsejables.
La variabilidad de respuesta al fármaco puede estudiarse mediante monitorización de concentraciones plasmáticas, aunque es una práctica controvertida, y se considera restringida a poblaciones especiales.
FALLO TERAPÉUTICO: FALTA DE ADHERENCIA
Es la causa más frecuente de fracaso.
Debe mantenerse una adherencia próxima al 95%.
Existen guias específicas para el abordaje de este elemento clave del TAR.
http://www.gesida-seimc.org/pcientifica/fuentes/DcyRc/Gesida_dcyrc2008_adherenciaTAR.pdf